Viajar sigue siendo una prioridad global, pero con nuevas reglas. Así lo indica el Índice de Valor del Viajero 2025 elaborado por Expedia Group, que analiza los hábitos de más de 11.000 consumidores en 11 mercados. El estudio revela una transformación significativa en la forma en que las personas planifican, reservan y experimentan sus viajes, destacando el rol creciente de la confianza, las redes sociales y los programas de fidelización.

A pesar de un contexto global marcado por la incertidumbre económica y geopolítica, el deseo de viajar permanece firme: el 88 % de los encuestados planea realizar un viaje de placer en los próximos 12 meses, y un 68 % tiene previsto reservar viajes internacionales, lo que representa un aumento del 19 % respecto a 2022. El 50 % de los participantes asegura que viajar es más importante ahora que hace cinco años, reflejando su valor emocional y personal.

“Comprender cómo están cambiando las prioridades y preferencias de los viajeros es fundamental”, señaló Greg Schulze, director comercial de Expedia Group. “A pesar de los desafíos, el deseo de explorar el mundo sigue siendo fuerte, y en Expedia Group buscamos ofrecer las herramientas necesarias para que nuestros socios puedan crear experiencias memorables”.

Redes sociales e influencers: los nuevos agentes de viaje

El informe destaca que el 61 % de los viajeros encuentra inspiración en redes sociales, un aumento notable frente al 35 % registrado en 2022. Además, el 73 % afirma haber sido influenciado por recomendaciones de creadores de contenido o influencers al momento de reservar un viaje. Entre los menores de 40 años, ese porcentaje asciende al 84 %, marcando una tendencia clara: las plataformas digitales y las opiniones confiables son clave para captar la atención del viajero moderno.

Confianza sobre precio: una nueva ecuación de valor

Si bien el precio continúa siendo un factor decisivo —el 58 % de los consumidores se declara más consciente del gasto que en años anteriores—, la confianza en las experiencias también gana peso. El 75 % de los viajeros está dispuesto a pagar más por alojamientos con mejores críticas, un dato que resalta la influencia de las valoraciones online en la toma de decisiones.

En lo que respecta a servicios específicos, como vuelos o alquiler de autos, las prioridades varían por región. Por ejemplo, los viajeros de China valoran las experiencias sin contacto; los alemanes priorizan los reembolsos completos; y para canadienses, australianos, franceses e italianos, la asequibilidad sigue siendo el criterio dominante. En el caso de los alquileres de autos, el precio sigue siendo el principal factor global, pero entre los menores de 40 años, las opiniones positivas tienen casi el mismo peso.

Fidelización: un recurso en crecimiento

El estudio subraya el rol creciente de los programas de fidelización, tanto dentro como fuera del sector turístico. El 83 % de los viajeros planea canjear puntos por experiencias de viaje, y el 82 % se muestra abierto a utilizar beneficios de programas no turísticos —como tarjetas de crédito o comercios— para reservar sus vacaciones. Esta tendencia marca un nuevo camino para las marcas: ofrecer recompensas integradas y flexibles puede marcar la diferencia.

Nuevas formas de viajar

Otra de las grandes revelaciones del estudio es la consolidación de las flexcations y los viajes bleisure (que combinan trabajo y ocio), sobre todo entre los menores de 40 años. Esta modalidad permite a los viajeros extender sus estancias y disfrutar de destinos de manera más relajada, convirtiéndose en una opción ideal en un mundo cada vez más digital y remoto.

Finalmente, el informe detecta diferencias regionales: los consumidores de China (87 %), Reino Unido (77 %) y Alemania (72 %) son los más propensos a planificar viajes internacionales. Y en términos de alojamiento, actividades y cruceros, las reseñas positivas son un elemento decisivo, en especial para los jóvenes, de los cuales el 80 % está dispuesto a pagar más por una experiencia respaldada por buenos comentarios.

El Índice de Valor del Viajero 2025 traza una hoja de ruta clara: para conectar con el viajero actual, las marcas deben priorizar la transparencia, la confianza, la personalización y, cada vez más, el entorno digital como fuente de inspiración y decisión.