Desde el próximo 25 de mayo, Aerolíneas Argentinas tendrá cinco vuelos semanales a Nueva York, y después del 29 de junio, la frecuencia llegará a 6. Así fue anunciado por la aerolínea de bandera, que hasta fines del año pasado sólo contaba con un vuelo diario hacia la gran manzana.

Además de la ciudad de Estados Unidos, la programación internacional de la compañía a partir de julio tendrá una reducción de uno de los dos vuelos semanales a Madrid, para subirlo a 10 frecuencias a partir de junio.

Así, según comunicó la compañía, AA tendrá a partir de julio 10 frecuencias a Madrid, otras 10 a Miami, 6 a Nueva York, 5 a Roma y Cancún y 3 a Punta Cana.

“Ponemos la oferta donde consideramos hay un posibilidad de crecimiento, de generar nuevos puntos de venta en el exterior y con la idea de incrementar la llegada de turistas extranjeros a nuestro país. De esta manera, Aerolíneas puede contribuir enormemente al desarrollo económico de la Argentina”, dijo Pablo Ceriani, presidente de Aerolíneas Argentinas, durante el anuncio de los nuevos vuelos a Nueva York en conferencia de prensa.

El presidente de Aerolíneas Argentinas además, estimó que la empresa tendrá un déficit de USD 570 millones este año. La cifra es similar a la del año pasado, pero para compensar esta pérdida, el plan de la línea aérea de bandera es crecer en la venta de pasajes al exterior con nuevas rutas.

Ceriani precisó que espera que la compañía facture USD 1.700 millones en 2020, en línea con los ingresos del año previo, gracias a la venta de alrededor de 13 millones de pasajes. “A medida que podamos llevar adelante el plan de crecimiento, el déficit de la compañía (que este año será, al igual que en 2019, de USD 570 millones) se va a ir reduciendo paulatinamente”, señaló Pablo Ceriani, quien asumió la presidencia de la empresa en diciembre, luego del cambio de Gobierno.

Además de atraer mayor turismo “receptivo” a Argentina, la empresa prevé, como parte de su estrategia de crecimiento, fortalecer su presencia en los países de la región, que sería favorecida por el plan de volar a naciones limítrofes desde el Aeroparque Jorge Newbery, que hasta ahora estaba limitado a los vuelos de cabotaje.

“La recuperación (de la aerolínea) va a venir con la recuperación de la economía (doméstica). La actividad aerocomercial depende mucho de la macroeconomía”, afirmó Ceriani, en relación a la crisis económica que atraviesa la Argentina. A pesar del crecimiento que tuvieron las aerolíneas low cost en la Argentina en los últimos años, la compañía aspira a tener una participación del 75% del mercado doméstico en los próximos años, en comparación con el 63% actual.