El nuevo paso fronterizo que se habilitará entre Argentina y Bolivia, permitirá unir la población de Mecoya con Mecoyita, ciudades con mismo nombre pero ubicadas dentro de países diversos. Las cancillerías de ambos países, se reunieron en varias oportunidades con la idea de llevar adelante todos los procedimientos necesarios para la apertura de este nuevo paso fronterizo, que no solo reducirá el traslado por tierra sino que ayudará al desarrollo del turismo bilateral.

 

Hugo Mamani, intendente de la localidad de Tumbaya, fue quien dio a conocer la noticia. El funcionario aseguró que las gestiones vienen muy avanzadas, y si bien no precisó fechas exactas sobre la inauguración del mismo, indicó que autoridades de ambos lados, trabajan para realizarlo lo antes posible.

 

Cuatro son los pasos internacionales que unen a ambos países: el de la Quiaca-Villazón, el del Condado-La Mamora, Aguas Blancas- Bermejo y el de Salvador Mazza con Yacuiba. Con la apertura de esta nueva opción, se podrá unir las ciudades de Tajira y San SAlvador de Jujuy en cinco horas, es decir, cuatro horas menos que las nueve que demanda hacerlo a través de Orán y Bermejo.

 

Según dio a conocer a la prensa local el intendente de Purmamarca, Marcelo Aramayo, los representantes de Cancillería tiene prevista un reunión clave donde se concretarán los lineamientos a seguir, mientras que las autoridades locales de ambos municipios, harán lo propio la próxima semana en Tarija.

 

Desde esta localidad, han expresado que se tiene la idea de priorizar el tramo que va desde Tajira, pasa por Uriondo y Padcaya, llamado Tolomosa-Camacho, tramo que a su vez es parte de una obra del gobierno boliviano que incluye el asfaltado de 11 km. de la carretera que va de Tomolosa a Pampa Redonda. En un segundo momento, se avanzará en el tramo desde Pampa Redonda a Camacho para así luego arribar a Camacho-Mecoya y en conjunto con Argentina, terminar la obra.

 

Los campesinos así como los sectores productivos de la provincia de Avilés, Cercado y Arce, se mostraron más que satisfechos por la obra en carpeta que impulsan ambos países, ya que el nuevo paso internacional permitirá el desarrollo de las comunidades que se encuentran a su pasa, potenciar la agricultura y la ganadería, generar nuevos lazos vinculados al turismo y el intercambio de mercaderías, en una zona central del norte argentino.

 

La frontera entre Argentina y Bolivia siempre ha sido materia de discusiones debido al intenso tránsito de personas que habitan en la región de la Puna, el intercambio turístico y el narcotráfico. La falta de controles y las actividades sociales y económicas informales de los habitantes de esta zona, ha hecho que sea muy difícil controlar los movimientos de personas como en otras aduanas del país.