Según informa la Organización Mundial del Turismo (OMT), este país supone "uno de los ejemplos más recientes" a la hora de promover y flexibilizar los viajes.

Ante esto, el organismo ha aplaudido las medidas adoptadas por Mongolia para facilitar los viajes, siguiendo así su recomendación a los diferentes países para reducir las restricciones e impulsar con ello el crecimiento del sector turístico y lograr un efecto positivo en la economía.

 

De hecho, la facilitación de los viajes, estrechamente vinculada con el desarrollo del turismo, "puede contribuir de forma decisiva a los efectos beneficiosos del turismo, entre ellos el crecimiento económico y la creación de empleo", aseguraron desde el ente.

La decisión del país ha coincidido con la resolución de abrir el espacio aéreo de Mongolia conforme a lo establecido en la política estatal del sector de la aviación civil hasta 2020, aprobada por el Parlamento del país en 2013, para promover un sector nacional de la aviación civil competitivo en atención a su potencial de impulsar el desarrollo socioeconómico.

Para el secretario general de la OMT, Taleb Rifai, la facilitación de los visados y la liberalización del espacio aéreo son aspectos "centrales" para el máximo aprovechamiento del potencial de desarrollo del turismo. No obstante, considera que aún quedan importantes ámbitos de actuación en estos dos aspectos, a pesar de los avances conseguidos.

En esta línea afirmó que el turismo puede tener repercusiones de gran calado en el PIB, las exportaciones y los puestos de trabajo, siempre y cuando se lleven a cabo "políticas adecuadas".

En un informe de la OMT y el Consejo Mundial de Viajes y Turismo sobre los efectos de la facilitación de los visados en la creación de empleo, se observaba que, sólo en las economías del G-20, la mejora de los trámites de visado y entrada en el país podría generar 206.000 millones de dólares más en concepto de ingresos turísticos y crear otros 5,1 millones de puestos de trabajo entre 2012 y 2015.