Hace justamente un año Roberto Brunello, presidente de Fehgra, era entrevistado por el diario Clarín sobre el tema de la efectividad real de la nueva ley de feriados, y en aquella nota el empresario argumentaba: “la actividad hotelera se estanca”, desatando un conflicto que llevaría unos cuantos meses revertir. Este episodio había sido el puntapié inicial para un aparente distanciamiento de los hoteleros nucleados en la Federación de Hoteleros gastronómicos de la Argentina, y los funcionarios del Ministerio de Turismo de la Nación.

El tema habría vuelto a encenderse debido a la firma de un acuerdo llevado adelante por la CAT (Cámara Argentina de Turismo) y el gobierno nacional, sobre 'fortalecimiento del turismo interno y receptivo internacional`.

En el mismo, la CAT suscribió un acuerdo con el Poder Ejecutivo Nacional, con el fin de establecer “un marco de trabajo que contiene herramientas y mecanismos disponibles para todos los sectores que componen  la actividad turística, con el consecuente impacto en el crecimiento de las empresas que integran el sector, y en la economía nacional en su conjunto”.

El acuerdo prevé para las empresas del sector, herramientas e instrumentos de financiamiento, de fortalecimiento de las exportaciones, de mejora de la competitividad en lo que respecta a la incorporación de tecnología, formación de recursos humanos y de promoción del empleo registrado. Todo, envuelto en el marco de una gestión que tiene como pilar esta Ley de Feriados, que algunos hoteleros consideran que afecta a los destinos de “forma desigual”, y que no fue consensuada con los diferentes sectores.

Durante el acto de cierre del exitoso workshop llevado a cabo la semana pasada, el secretario de Turismo, Daniel Aguilera, fue el encargado de dejar en claro la posición del gobierno al respecto: “Hay voces críticas, con intencionalidad política, que cuestionan el reordenamiento de los feriados largos dispuesto por el gobierno nacional", dijo y agregó: “da previsibilidad a la actividad turística, da posibilidades al argentino de planificar sus viajes y vacaciones, rompe la estacionalidad de muchos destinos, y eso es lo importante".

El funcionario defendió la Ley más importante de la gestión de Enrique Meyer diciendo que "no hay conflicto con el calendario escolar, ya que el ordenamiento fue consensuado con autoridades y expertos de educación". Al parecer, entre los pasillos se habría escuchado decir a algunos empresarios que “era muy triste ver las playas llenas de gente y las escuelas vacías”, pero sobre todo, que no se trabajaba en consensos para establecer criterios comunes con respecto a estas medidas, frases que habrían desatado la contestación de Aguilera.

Por su parte, Oscar Ghezzi, también presente en el acto, se ocupó de poner paños fríos en el asunto al advertir que "La actividad y cada sector tienen inconvenientes. La gente que estamos en turismo sabemos que la solución es el trabajo, en conjunto y en forma federal, como hoy".

Durante su discurso, el presidente de la Cámara Argentina de Turismo afirmó que "el interés de la CAT es que todos puedan trabajar unidos en pos de objetivos" y reiteró que "cuando se piensa en dificultades, en esta actividad hay que trabajar y aunar esfuerzos, llevando ideas para solucionarlas".

Consultado por este medio, el presidente de Fedecatur Federico Lanati, expresó al respecto: “Yo estoy convencido de que es muy bueno, por más que se hayan hecho críticas desde algunos lugares” pero remarcó: “también sabemos que hay falta de rentabilidad en las empresas”. Roberto Brunello, presidente de Fehgra, no quiso dar declaraciones al respecto.