La Reserva Ecológica Costanera Sur, “La naturaleza al alcance de la mano”

24/03/2013 | 16:25 | La Costanera Sur ha pasado por varios vaivenes de esplendor y de contaminación. Un poco de historia sobre este lugar elegido por los porteños y que hoy es un referente de ecología en la ciudad. Por Esteban Ezequiel Rodríguez Viudez.
 

EcoPulso


Su historia se remonta desde 1918 cuando miles de ciudadanos de Buenos Aires, arribaban a la Costanera Sur, simplemente a tomar un poco de aire fresco y a mojarse a las orillas del Río de La Plata, que para ese entonces, no se encontraba todavía contaminado por los desperdicios que la Ciudad arrojaba al río. Convirtiéndose en esa zona en el Balneario Municipal. 

El período de apogeo del Balneario Municipal, fue hasta el año 1950/60, ya que luego entró en decadencia a causa de la contaminación. 

Hoy en día nos encontramos con una realidad donde la naturaleza se apoderó del lugar gestando vida y esplendor, utilizando como base y molde las prematuras ruinas del proyectado denominado “Centro Administrativo de la Ciudad”. El abandono de un emprendimiento que pretendía ganarle tierras al río, azarosamente terminó regalándole a Buenos Aires un sitio único, “La Reserva Ecológica Costanera Sur”.

El Balneario Municipal  fue inaugurado en 1918, y a través de los años pudo conocer etapas de apogeo y períodos de decadencia.

Legalmente la creación de la Reserva Ecológica Costanera Sur, fue a partir del 5 de junio de 1986, cuando a raíz de reclamos realizados por distintas ONGs ambientalistas, el Concejo Deliberante de la Ciudad de Buenos Aires, sancionó la ordenanza Nº 41.247, otorgándole protección al sitio.

En el 2012 se cumplieron 26 años desde la creación de la Reserva Ecológica Costanera Sur, tiempo suficiente  para que los porteños entendamos, que somos parte de la naturaleza y no podemos vivir fuera de ella.

Lo que para los planificadores e ingenieros resultó finalmente inadecuado, constituyó para la naturaleza un inmejorable escenario donde desplegó paulatina y maravillosamente una inigualable obra de vida, ya que en forma natural fueron llegando, transportadas por el río, el viento o los animales, semillas de numerosas especies. Muchas de ellas eran características de ambientes de la ribera rioplatense, otras eran de especies exóticas provenientes de ejemplares utilizados en la parquización de calles, plazas y jardines. Todo ello aportó para que hoy contemos con una Reserva Ecológica  única e irrepetible. 

La costanera Sur tuvo una revalorización arquitectónica entre las décadas del 20 al 30, con un estilo arquitectónico art déco, fueron instaladas distintas confiterías de renombre como la famosa Munichy distintos monumentos como la famosa estatua denominada “La Neridas” de la vanguardista escultora Lola Mora.

En la Actualidad depende de la Subsecretaría de Medio Ambiente del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, contando con el apoyo de distintas organizaciones ambientalistas como por ejemplo: la Asociación Ornitológica del Plata, La Fundación Vida Silvestre, Amigos de la Tierra y el Departamento de Ciencias Biológicas de la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA., conformando entre dichas entidades un Consejo de Gestión.

De aquel proyecto que consistía en la conformación de un Centro Administrativo de la Ciudad”, que fuera finalmente desestimado, aunque fueran continuados los trabajos de descarga de escombros y los trabajos de relleno, en forma alternada hasta mediados de 1984, cuando finalmente fueron suspendidos definitivamente.

Fue a partir de ese momento y a través de generación espontánea que distintas comunidades de vegetación, fueron instalándose en la zona. Los pastizales y las lagunas que fueron surgiendo a través de la acumulación de lluvias, permitió la conformación de una gran diversidad biológica. Transformándose  en un escenario natural, que convoca a la realización de distintas actividades recreativas en contacto con la naturaleza como ser el ciclo de turismo, observación de aves, caminatas, actividades aeróbicas, safaris fotográficos, etc.

Por esa razón, la Reserva Ecológica Costanera Sur,  es un área natural al alcance de las manos de todas las personas que transitan por el micro centro porteño, donde además de realizar todas las actividades mencionadas anteriormente, uno se puede relajar contemplando el río de la Plata y  al mismo tiempo puede conectarse con un medio ambiente, en el cual la naturaleza es la protagonista.

Recomendaciones para los visitantes

* Observe a los animales, sin olvidar a los insectos; escuche sus sonidos, descúbralos entre la vegetación; trate de identificarlos, así como a los ambientes que frecuentan; registre sus características.
* Mire la vegetación. Descubra los diferentes matices de verde de las distintas especies, observe las características de su follaje, la época del año en que florecen, qué animales se alimentan de sus frutos; encuentre las variaciones del paisaje según el paso de las estaciones.
*  Venga a caminar y gozar del silencio y la tranquilidad que ofrece este paseo.
* Utilice los cestos para arrojar papeles y residuos. 
* Para su tranquilidad, las 350 has de la Reserva son monitoreadas por cámaras de televisión instaladas sobre una torre de 12 m de altura, que permiten un eficiente control y la rápida convocatoria de servicios de auxilio y prevención: guardaparques, bomberos, servicios médicos.
* El acceso a la Reserva Ecológica es libre y gratuito.

Horarios:
Abril a octubre: 8:00 a 18:00 hs.
noviembre a marzo: 8:00 a 19:00hs.
Para visitas guiadas, caminatas nocturnas u otras actividades comuníquese a los teléfonos (54-11) 4315-1320 / 4129
Av. Tristán Achával Rodríguez 1550 - (1107) Buenos Aires - Argentina

MGTS Lic. Esteban Ezequiel Rodríguez Viudez
@estebanviudez 
eerodriguezviudez68@hotmail.com

 

EcoPulso

Comentar

 

Por favor complete todos los datos. Gracias.

  Nombre:
  Email:
  Comentario:
  Clave:
  The CAPTCHA image
Audio (mp3)
     

Comentarios (0)

 

EcoPulso

Conocé un museo sustentable

El Museo Biesbosch, ubicado en los Países Bajos fue re diseñado teniendo en cuenta el entorno natural donde está ubicado.

 

leer nota completa