La temporada de vacaciones ya está aquí y con ella las ganas de salir de la ciudad, descansar, ponernos el traje de baño y tomar sol, incluso antes de llegar al destino elegido. El aire libre y el contacto con la naturaleza es vital para la salud mental y física de cualquier persona, lo que conlleva una permanente exposición solar, es importante recordar que nuestra piel debe estar protegida de los agentes físicos para no sufrir quemaduras o insolaciones que después nos harán sentir mal. 

El color bronceado a todos nos hace bien e incluso mejor nuestra apariencia, pero hay que tener conciencia de que si no usamos el protector indicado diariamente, sufriremos las consecuencias a corto, mediano y largo plazo. Hay que tener presente que el efecto del sol en el cuerpo sin protección indicada, es acumulativo, progresivo e irreversible. 

Existen tres tipos de rayos solares: los UVC, los UVB y los UVA y la intensidad de la radiación ultravioleta depende de diferentes factores; la altura del sol, reflexión por el suelo, la latitud y la nubosidad. Para lograr el balance perfecto entre exposición y protección sin dejar de disfrutar del aire libre, hay que tener en cuenta ciertas recomendaciones que nos presenta Nu Skin:

- Si te vas a exponer al sol, de preferencia hazlo bajo una sombrilla.

- Utilizar y aplicar en el cuerpo el protector solar cada 2 horas, sobre todo si estás expuesta al sol de manera directa.

- Cada vez que salimos del agua, se debe volver a aplicar el protector. 

- Se debe utilizar bastante cantidad para esparcirlo por todo el cuerpo que está expuesto.  

- Utilizar un protector solar que vaya mejor con el tipo de piel. Para los primeros días de exposición, siempre arriba de 50 FPS.

- Ponerse una buena cantidad de protector solar, en los lugares sensibles que no le prestamos mucha atención, como orejas, cuello, platas de los pies o dorso de las manos. 

- Siempre utilizar sombreros, además de estar de moda te protegen de la exposición directa.

- Lo mismo sucede con los lentes de sol, deben dar una protección de 99% a 100% contra las radiaciones UV.

 

- Tomar líquido (agua) es indispensable. El cuerpo necesita mantenerse hidratado todo el tiempo de exposición. 

- Evitar la exposición al sol durante las horas en que está más fuerte: de 10 a 16 horas.

- Usar protector solar, no significa tener mayor tiempo de exposición. 

- Usar ropa liviana clara que den protección, blusas o camisas de mangas largas y pantalones largos holgados.

- No confiarse en las nubes ya que dejan pasar el 80% de la radiación.

- Si sufriste de los efectos del sol de manera leve, se debe utilizar algún producto post solar específico para hidratar la piel, y evitar exponerse nuevamente al sol, por lo menos hasta que se haya recuperado.

 

- Si la quemadura es más grave hay que consultar al médico. No utilizar remedios caseros, ni automedicarse.